jueves, 7 de julio de 2016

Jose Aldaba, responsable de comunicación de Cruz Roja

«El encierro no es un cross. Se dan unas circunstancias que pueden costar la vida»
Añadir leyenda

Una
imagen que va unida cada día a los encierros es la de José Aldaba, un txantreano responsable de comunicación de Cruz Roja, que cada mañana, al terminar la carrera de los astados, ofrece el parte de atendidos por el dispositivo sanitario que vigila el encierro. Años atrás, hasta que descubrió el mundo de la radio de mano de Radio Pamplona, fue un inquieto vecino que participó en la Asociación de Vecinos del barrio, en la Comisión del Rastro, en la de Fiestas, en Txantrea Irratia... Hoy sus múltiples obligaciones en Cruz Roja le llevan todo su tiempo, pero ha sacado un hueco en vísperas de la fiesta para atender nuestras preguntas.
¿Cómo vives la cuenta atrás conforme se acercan los Sanfermines
Con ansiedad. Mientras el resto de la población lo hace con deseo y alegría, a quienes nos toca trabajar en
Sanfermines, la cuenta atrás es siempre un periodo de nerviosismo para tener todo preparado y responder a la demanda que se nos exige.
Imagino que es muchísimo el trabajo de Cruz Roja para organizar el dispositivo de Sanfermines, ¿no es cierto? 

El dispositivo se inicia desde el mes de mayo, e incluso antes en algunos aspectos, cuando desde la Asamblea local de
Pamplona se comienza a coordinar toda la infraestructura, que nos es poca: médicos, enfermería, socorristas..., materiales, flota de vehículos, sistemas de comunicación... Hay que disponer de muchos recursos (especialmente humanos), que hay que concretar y otros técnicos o materiales que hay que tener previstos. Todo ello en coordinación con la Junta de Protección Civil Local de Pamplona. Para las diferentes entidades e intervinientes que formamos parte de este basto operativo, los Sanfermines duran bastante más que ocho días y medio.
No sé si has sido corredor de los encierros, pero ahora, desde tu actual responsabilidad, ¿cómo se vives esos minutos tan intensos cada mañana de San Fermín

Antes de pertenecer a Cruz Roja, solo dos veces he estado dentro del «recorrido» del encierro, en el momento previo a la carrera. La primera para un reportaje que elaboraba para Radio
Pamplona (mi cuna de la comunicación) y que me permitió rematar las grabaciones sonoras y testimoniales, hasta llegar al corral de Santo Domingo, «después del último canto». No sé cuántos metros separan la barrera de Policía Municipal del portón. Pero me pareció una maratón, mientras desde corrales apremiaban mi ritmo porque «¡¡eran las ocho!!». Consta en los anales de los primeros encierros retransmitidos por TVE. Creo que, por unos segundos, retrase el encierro. ¡¡Perdón!!

La segunda fue una de esas «¡¡¿¿A qué no hay...??!!» que, a pocos minutos me hizo recapacitar y retirarme del recorrido para salvaguardar mi vida y las de aquellos que, realmente, la arriesgan.
¿Un consejo desde tu puesto a quien quiera correr el encierro? 
Los consejos que transmitimos desde Cruz Roja, sea cual sea el tramo en el que se corra el encierro, siempre están dirigidos hacia la «consciencia» de quien participa en un evento de estas magnitudes, y a que están expuestas a riesgos «vitales», tanto por la «agresión animal», como por el «entorpecimiento humano» u otras circunstancias. Siempre se debe «retirarse» pasada la manada o seguir «adelante», salvo riesgo de embestida, para dejar espacio en los vallados a quienes puedan correr más peligro.

Quién quiera correr debe estar en perfectas condiciones e informado y asesorado. El encierro no es un
cross. Se dan circunstancias que «pueden costar la vida».
¿Te limitan un poco estas obligaciones en tu celebración personal de la fiesta? 
Quienes trabajamos en
Sanfermines (asalariados o voluntariado) tenemos compromisos adquiridos. Hay que estar ahí en perfectas condiciones. Nos hace vivir la fiesta de otra manera, ya que hay que «madrugar». El personal es muy responsable y, me imagino que como yo, cuando acaban los «fuegos» a dormir, porque a la mañana siguiente queda otra incógnita...
¿Cuál es tu momento preferido de los Sanfermines
El estar en «primera fila del encierro» es una
sobredosis de adrenalina (a veces para bien y otras no tanto) y emociones irrepetibles. Pero, a pesar de que la demanda imprevista de medios de comunicación, prevista o circunstancial siempre está ahí, aprovecho el mediodía para compartir con amistades los momentos de la fiesta. En Sanfermines, cualquier momento, sin prevenir, puede ser el mejor. Pero, lo siento y aunque con mucha pena, cuando acaban las fiestas pienso: misión cumplida y a descansar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario